Por Maria Navarro
También conocido como el Triángulo del Diablo y el Limbo de los Perdidos es un área geográfica de 3 900, 000 kilómetros cuadrados, situado entre las Islas Bermudas, Puerto Rico y Fort Lauderdale (Florida). En este Triángulo famoso han ocurrido muchas desapariciones misteriosas de buques, aviones y personas.
Uno de los incidentes más raros y conocidos ocurrió cuando la experta piloto Helen Cascio piloteaba su “Cessna 172“, durante un corto vuelo a la isla Gran Turco en Las Bahamas. Aproximándose a la isla, la torre de control le iba facilitando las instrucciones. Después de conectar varias veces, en una de ellas, Helen no respondió, aunque el canal de la radio estaba abierto. Los operadores de la torre escucharon decir a Helen: “Ha debido ser una falsa maniobra. Esta debería ser Turco, pero ahí no hay nada, ni aeropuerto, ni casas. No hay nada”…Posteriormente recibieron lo que sería su última frase: “¿No hay manera de salirse de esto?” Nunca se encontraron huellas del avión, ni de la piloto, ni del pasajero que la acompañaba. Las explicaciones son múltiples. Se ha especulado de que la zona está encima de un remolino o un agujero en el océano que se traga embarcaciones o aviones que pasan por encima de la zona.
Otra posibilidad planteada es que en la zona se encuentra la sumergida Atlántida, cuyas pirámides construidas como fuentes de energía podrían funcionar de manera esporádica y perturbar los sistemas de control y comunicación.
Existen otros criterios que creen que invasores extraterrestres pueden de alguna manera accionar sobre el campo magnético del Triángulo de las Bermudas y capturar humanos y artefactos para su propia investigación.
Este misterio se remonta desde el Siglo XIX y, desde entonces, han desaparecido en El Triángulo de las Bermudas un total de 50 barcos y 20 aviones en esa zona.
Análisis menos fantasiosos apuntan a que las fuentes y la profundidad de las aguas pueden explicar la ausencia de restos de las desapariciones, que realmente ocurrieron a más de 600 Km. Además, naves civiles y militares atraviesan la región diariamente sin contratiempos. Algunas explicaciones indican que hay presencia de grandes campos de hidratos de metano en las plataformas continentales, y que sus erupciones periódicas pueden producir regiones de agua espumosa que no es capaz de proveer una flotación adecuada para los barcos. Si el área espumosa se forma alrededor del barco provocaría que éste se hundiera rápido y sin previo aviso.
Se plantea que las leyes de la física no se cumplen en esa zona, y es uno de los dos únicos lugares del mundo donde una brújula no indica el verdadero norte magnético.
Muchos casos de desapariciones de aviones de carga, comerciales y militares se han
reportado, pero el esclarecimiento de los hechos es confusos y no comprobables, ya que en algunos casos las desapariciones ocurrieron en aguas extraoficiales, por lo que no se ha llegado a conclusiones certeras al respecto. El tema continúa abierto y es punto de debate entre creyentes y escépticos.
Otro misterio, aún sin resolver, de las profundidades del mar.




